Eramos ocho. Reservado un par de dias antes. Mesa lado ventana. Mañana fria pero dentro del comedor acogedor y dandonos el sol. Agradable. La mesa amplia. No tardaron mucho en atendernos. La carta no es muy extensa. Las racionens grandes.
Pedimos unos entrantes para compartir y luego un principal cada uno.
Entrante:
- Dos de tortos variados. Seis unidades, dos de queso, dos de morcilla caramelizada y dos de picadillo. Muy ricos. El torto sabroso, sueve y esponjoso.
- Principal.
- Fabada. Mejor para dos. La faba aceptable. Para mi gusto le faltaba un poco ce intensidad en el sabor. Quiza sea porque compango ( chorizo, morcilla y lacon) no era de lo mejor. Vamos que no es de las mejores que he comido.
- Otros comensales pidieron: Cabritu que dijo que estaba muy bueno. Solomillo, que era enorme y parece que ser que estaba aceptable y otras dos comensales, secreto iberico...tambien aceptable.
Postre: Pedi tarta de avellana ( nos dijeron que todos los postres son caseros ). No me llamo la atencion. A mi no me sabia a avellana.
Bebidas: 4 bot. de LA PLANTA R.Duero ( 19 e unidad ), agua y cafes.
El servicio y tempo platos bien. Salimos a 37 e/pax. Un poco justo la relacion calidad/precio, al menos en lo que se refiere a la fabada.
Puntuacion: 6,5/10
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