Eramos nueve. Reservado unos dias antes. Por circunstancias de temperatura nos dispusieron mesa en el comedor interior, lado cristalera con buenas vistas. Antes tomamos un vermut en la terraza. Pedimos para compartir.
- Tres de gambas a la plancha. Nada que destacar. Ni mal ni bien.Preguntamos si eran gambas pequeñas. dijeron que si,pero luego era gambon.
- Tres de calamares fritos: Muy ricos y sabrosos. raciones abundantes.
- Tres de fritos de pixin. Le faltaba algo de sabor.
- Dos tablas de quesos. Abundantes. variadas. estaban buenos.
- Dos postres, una arroz con leche y una tarta de la abuela. Se dejaban comer.
- Bebidas: 4 de sidra, 2 bot. riona cza., agua y 6 cafes ( invitacion casa ).
El servicio muy correcto y pendiente. La camarera que nos atendio muy agradable. Salimos a 30 e/pax.
Puntuacion 6,1 / 10
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