Eramos seis. Reservado unos dias antes. Antes de entrar a comer tomamos un vino en la terraza. hacia sol, pero un viento frio que no invitaba a comer fuera. Nos dispusieron una mesa amplia en el interior de la terraza. Tardaron un poco mas de la cuenta en tomarnos la comanda. La carta sigue sin existir....todo de viva voz y saber lo que cuesta cada cosa. Menos mal que al final se come bastante bien. Pedimos para compartir unos entrantes y luego un plato principal cada uno.
Entrantes:
- Dos raciones de calamares fritos frescos. Racion abundante. (18e c/u). Muy ricos. bien rebozados y con sabor a calamar que no es facil
- Una de Llamparas. Muy bien cocinadas. Tiernas y sabrosas.
- Plato principal. Lubina ( 18e ). Mu gusto mucho. En su punto, fresca y sabrosa. racion abundante.
- Postres. Pedimos tres tipos de tartas diferentes. Se dejaban comer..
- Bebidas. Tres botellas de Verdejo ( 16 e c/u). Agua y tres cafes ( invitacion casa.).
El servico y el tempo de los platos correcto, a partir de la toma de de la comanda. El sitio muy agradable. La propiedad se intereso por nuestro parecer sobre la comida.Salimos a 38 e/pax
Puntuacion: 8,3/10
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